Sergio Nuño reseña que el ambiente musical que rodeó a las Hermanas Landín fue lo que las marcó para dedicarse a esta actividad artística. Sus padres y sus hermanos gustaban de la música, su papá tocaba la guitarra y su mamá tenía una bella voz. El guitarrista Andrés Cortez Castillo, vecino de la familia, las escuchó cantar y las invitó a participar en la inauguración del teatro Abelardo L. Rodríguez, después de este primer intento las hermanas Landín se deciden a probar fortuna en la legendaria emisora XEYZ donde tienen la fortuna de ser escuchadas por los directores artísticos Gonzalo Cervera y Guillermo Álvarez, debutando casi de inmediato alternando con un elenco de primera como Margarita Romero, Ma. Luisa Bermejo, Emilio Tuero y Vicente Bergamn, poco después son incluidas en la programación oficial de la XEFO. Así se van abriendo camino hacia el estrellato, poco después se empiezan a abrir las puertas grandes y es cuando se abre la puerta mayor, la inalcanzable radiodifusora de ayuntamiento, la XEW, el templo de los grandes de la época y es así que La Voz de la América Latina desde México las hace debutar en 1938 en los famosos programas de la Casa Salazar distribuidores de los radios RCA Victor, adoptaron el nombre artístico de pirita y jade y poco después la grabadora Peerless las lleva a grabar sus primeros registros fonográficos, bajo la dirección artística de Fidel A. Vista. El dueto se disuelve en 1944 cuando Avelina contrae nupcias. De su etapa como Hermanas Landín escucharemos la canción ranchera “Pedacito de mi ser”, acompañadas de Los Charros de Atotonilco y de su etapa como Dueto Mari-lina, presentaremos el bolero “Mi amor de ayer”, con guitarras y ritmos.