Homero Manzi fue uno de los grandes del tango argentino y mundial. Sobresalió en la escena debido a la gran capacidad poética de sus letras, muchas de las cuales se convirtieron en verdaderos himnos del género. Homero Manzi tuvo una vida corta pero muy activa, fue poeta, profesor y director de cine, además de su labor en el tango. Homero Manzi, apodado Barbeta, nació el 1 de noviembre de 1907 y pereció el 3 de mayo de 1951. Se convirtió en uno de los poetas y letristas de mayor importancia en Argentina y hasta el día de hoy es recordado como una de las más importantes figuras del tango argentino. Homero Nicolás Manzione Prestera, como era su nombre completo, vivió su infancia en el Añatuya, Santiago del Estero, pero a los 7 años de edad se mudo junto con su madre y hermanos al barrio porteño de Pompeya. En la capital entabló amistad con Julián Centeya y Cátulo Castillo. Por influencia de este último y su padre (el conocido escritor José González Castillo), Barbeta comienza a dedicarse a la literatura. Manzi fue quien introdujo la mayor presencia de poesía en las letras de tango. Esta característica llegó a ser criticada porque muchas veces utilizaba recursos que hacían la comprensión de sus letras un tanto más difíciles que el común de las demás y en las cuales se destacaba la utilización del lunfardo. Con letra de Homero Manzi, presentaremos en la sección Rinconcito Arrabalero, “Torrente”, en la voz de Emilio Tuero y “Una lágrima tuya”, en la eterna voz de Alfonso Ortiz Tirado. (Imagen por Toni).